Con la expansión urbana aumenta la demanda de movilidad lo que conduce a la congestión, la contaminación y la degradación de la calidad de vida en las ciudades y se convierte en un problema de política pública. El transporte masivo es una de las soluciones para reducir el uso excesivo del automóvil. La pandemia del Covid-19 y los repetidos confinamientos han tenido un efecto positivo; las carreteras se han vaciado y la gente ha redescubierto caminar y andar en bicicleta. Esta reducción del número de coches en las carreteras ha supuesto una fuerte reducción de la contaminación. Con el regreso de los automóviles y la falta de infraestructuras adecuadas, andar en bicicleta en la ciudad puede parecer inseguro, especialmente por la presencia dominante de automóviles en las carreteras. Sin embargo, esta primera experiencia en bicicleta fue memorable y parece haber sido muy apreciada.

Desde esta perspectiva, este seminario planea intercambiar y presentar las recomendaciones necesarias para proponer soluciones y contramedidas efectivas, teniendo en cuenta las especificidades de cada ciudad: financieras, logísticas, redes existentes, estrategias ya implementadas, etc.